Final Fantasy XV no está tan cerca de Nintendo Switch como hizo creer Hajime Tabata. Porque Square Enix todavía no sabe cómo van a adaptar un juego tan exigente a una consola limitada de potencia. Pero ganas y esfuerzo no faltan.
El director del título ha explicado en una reciente entrevista todas las pruebas técnicas que están realizando y las dificultades que están encontrando. Tabata ha descrito la situación actual así: "hemos terminado los test y estamos calculando su base. Estamos en pleno debate sobre qué deberíamos hacer y cómo hacerlo realidad en Switch".
Parten de la base de que quieren que sea algo optimizado, como ha ocurrido con las versiones para PC y móvil. Tabata asegura que están siendo muy sinceros con Nintendo sobre las mejores opciones, porque hay una cosa que está clara, que el Luminous Engine no tira. "Cuando hicimos el test técnico para ver si podíamos usar el mismo motor nativo en Switch que usamos en las otras versiones de consola, intentamos que corriera pero los resultados no fueron satisfactorios", ha contado a Eurogamer, "no es lo que querrías".
Pero ese golpe no ha detenido al equipo de Tabata y están explorando otras soluciones, "como la customización del motor". Y entre estas alternativas está adaptar todo el juego a un set que ya está demostrando bien que sirve, el Unreal Engine 4. "Ahora estamos hablando con Epic sobre que podríamos hacer ahí, y si hiciéramos una versión de Switch quizá seríamos capaces de asociarnos".
La ausencia de grandes juegos en Nintendo Switch hacía dudar sobre su catálogo, pero Bethesda ha roto la primera barrera al anunciar Doom y Wolfenstein II para la híbrida. Square Enix está siendo un gran apoyo, y parece que seguirá siéndolo.