Lego Batman 3: Más allá de Gotham - primeras impresiones

¿Queda algún mes en el calendario en el que no salga un juego de Lego firmado por TT Games? Parece que estos productos licenciados llegan a las estanterías con más frecuencia que el ingreso de tu sueldo a primeros de mes. Ah, el dinero. Nos acordamos de eso porque los juegos de Lego hacen mucha caja para Warner Bros. Interactive. Y también para sus ingeniosos y currantes creadores, TT Games. Y lo cierto es que, pese a la enorme cantidad y la sensación de que los están ordeñando, también suelen ser buenos juegos. Y así llegamos a Lego Batman 3: Más allá de Gotham.

Como cabía esperar, la fórmula de éxito probado se mantiene casi intacta. Tenemos que conquistar un mundo de piezas de plástico con Batman y Robin, pero en esta ocasión con un giro de los grandes. No pasamos demasiado tiempo explorando las calles de la venerable Gotham, pues el espacio exterior también necesita ayuda y rescate.

La pareja de héroes consigue que la Liga de la Justicia les eche una mano, y por eso aparecen Superman, Wonder Woman, Cyborg, Flash y cía como personajes jugables. El enemigo vuelve a ser el Joker, que ahora quiere meternos el perro desde el espacio. Esto deja margen al estudio para unas interesantes novedades en el sistema de juego. La más importante es que Batman y otros personajes pueden volar en condiciones. Batman lleva un traje con una mochila propulsora 'jetpack' integrada, que debe recargar después de cada uso. Todos los trajes se pueden elegir ahora mucho más rápido y fácilmente con una súper-rueda de selección. Esto aligera el ritmo de juego enormemente.

El traje con 'jetpack' abre la estructura de niveles habitual claramente, donde sólo podíamos explorar a pie. Naturalmente, siguen existiendo muchas zonas que sólo se pueden abrir con las habilidades especiales de personajes concretos. Por lo tanto, tenemos que descubrir la manera de llevarlos hasta allí, porque no todos pueden volar o saltar lo bastante alto o lejos. A lo mejor tienen que construir mecanismos singulares a partir de un puñado de piezas Lego sueltas... Por ejemplo, en la Batcueva bajo la mansión Wayne montamos el cohete que por fin nos permitió hacer el viaje espacial.

Ahí arriba espera la siguiente sorpresa: la nave Batwing. Y es que Batman tiene una nave espacial de tipo caza que nos recuerda un poco a un Ala-X de Star Wars. Robin vuela siguiéndole en su propia mini-nave, probablemente celoso perdido. En la siguiente misión, ambos deben liberar una estación espacial interceptada y secuestrada por el Joker. El villano espera en su interior, sentado ante un ordenador retro, jugando a un videojuego que provoca extrañas experiencias fuera de la estación. Unos dientes falsos atacan a los héroes, y por tanto hay que derribarlos lo antes posible. El peculiar sentido del humor del estudio británico mantiene su línea y sigue funcionando; lo admiramos de forma regular en diálogos y escenas durante la porción vista de este nuevo juego. A los niños les encanta, pero es que los adultos sonríen una y otra vez.

El "space shooter sencillo", como lo denomina el director de juego asistente Stephen Sharples, es una copia descarada pero bien adaptada del genial Resogun. Preguntado sobre la inspiración, el desarrollador esquiva la comparación ágilmente. Pero no nos engañan: le han puesto incluso bombas inteligentes que limpian la pantalla, y vuelas por una estación espacial rotatoria mientras eliminas oleadas de enemigos. Al final espera una batalla de jefe de fase contra Jack en un misil. Por supuesto, controlado por el Joker, ¿a quién se le ocurriría si no ese sinsentido? Aunque no tenemos más detalles, habrá varios niveles de vehículos como este.

Tras ganar esta batalla al payaso, Cyborg y Flash ayudan a los dos héroes de Gotham a embarcar en la estación con el traje espacial. Hay que juguetear y hacer puzles por el casco exterior de la estación, mientras que Cyborg se puede transformar opcionalmente ya sea en robot gigantesco o en lavadora (ahí vuelve ese humor Lego). Todos y cada uno de los personajes cuentan con sus propios sistemas y conjuntos de trajes. Y naturalmente, Cyborg también puede volar como Batman.

Lego Batman 3: Más allá de Gotham ofrece una locura exagerada y encantadora dirigida principalmente a los chavales de la casa con su sentido del humor. El sistema de juego y los rompecabezas son tan simples como de costumbre, los cambios son pocos y cuidadosos, pero también significativos. Otra novedad interesante son los mundos de Realidad Virtual, inéditas secciones con una especie de laberinto de plataformas. Recuerdan, y no es casualidad, a las misiones de RV de Metal Gear Solid, y Sharples asegura que deberían aportar a una verdadera experiencia de entrenamiento Batman.

El nuevo trabajo de TT Games no inventa nada, sólo aporta unos cuantos cambios que parecen funcionar. ¿Y no es normal que hagan eso mismo? El juego sigue ese patrón tan conocido que ha llevado sus juegos al éxito millonario. Y lo que es más importante: la sensación de un juego fácil de aprender y de jugar sigue ahí, junto a un mundo en el que sigues pudiendo pasar un montón de horas. Como es habitual, esto se multiplica si juegas a dobles con otro amigo o familiar. En PS4 y Xbox One, Lego Batman 3 tiene una pinta estupenda, como ocurrió recientemente con Lego Marvel Super Heroes, La LEGO Película: El Videojuego o Lego El Hobbit. Y si Batman ha decidido volar al espacio acompañado de la Liga de la Justicia para hacer unos chistes siderales, ¿quién quiere perdérselo?