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Mighty No. 9

Análisis de Mighty No. 9

Los fans de Inafune por fin pueden respirar tranquilos porque su nuevo juego ya ha llegado. Se ha hecho mucho de rogar. Demasiado.

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El juego, el universo llamado a ocupar el lugar de sucesor espiritual de Mega Man. Mighty No. 9 ya está aquí. Porque es obra del mismo creador, Keiji Inune. Porque su jugabilidad y su temática son idénticas. Y porque como tal fue acogido por los miles de patrocinadores del proyecto que lo convirtieron en el que más cantidad de dinero lograba recaudar en Kickstater en sus primeras 48 horas allá por 2013. Pero desde entonces ha sufrido lo indecible para llegar hasta aquí, multitud de retrasos que incluso hicieron a los fans perder la esperanza. Es el momento de valorar si todo el sufrimiento ha merecido la pena.

El mundo está ha entrado en un estado de caos y emergencia a causa de un misterioso virus. Los robots, hasta ahora serviles y amables, se han vuelto hostiles y han desatado una ola de destrucción prácticamente imposible de detener. Excepto por un android valiente y combativo, Beck. No solo se encargará de luchar contra sus congéneres, también tratará de devolverl la conciencia a todos los mighty nos. No hay mucho más que buscar en una narrativa de dibujos animados de sábado por la mañana, repleta de guiños de humor para niños.

Como era de esperar de este proyecto, la jugabilidad se asemeja mucho a la que Inafune puso en marcha en su serie Mega Man. Acción vibrante lateral repleta de saltos milimétricos y disparos precisos, combinada con enemigos que aparecen en el momento más inoportuno y trampas por todas partes que acaban con tu vida de un solo toque. Pero eso solo es la antigua base, porque Mighty No. 9 añade una mecánica de absorción de enemigos para incitar a jugar con aun más precisión en búsqueda de máximas puntuaciones que consiste en debilitar a los enemigos con disparos para después absorberlos avalanzándote sobre ellos.

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Mighty No. 9

Es un título a la antigua, en el que las explosiones de Beck consumen sus vidas. Y en caso de perderlas todas durante una fase será necesario volver a empezar desde el inicio del nivel. Por supuesto, al final de cada pantalla espera su jefe con un poder para entregarte tras ser vencido. Al acabar entra en acción una de sus funciones online, un ranking que coloca tu puntuación comparativamente con la del resto del mundo.

La estructura de juego y de niveles también es clásica. Tras un pequeño prólogo se te da la opción de escoger a qué mighty quieres enfrentarte. Toda su pantalla está inspirada en su poder o habilidad, y al final será ese elemento el que Beck reciba para poder combatir con más fuerza en el futuro. Existe una relación de poder y debilidad entre todos ellos, pero siempre tendrán que batir a uno de ellos con tu ataque normal antes de empezar la ruleta. La mano de este experto en el género se sigue notando, y nos han gustado especialmente el del edificio del capitolio y la mina.

Son las batallas contra los jefes finales las que encapsulan esa dificultad inolvidable y a veces frustrante de los juegos de antaño. Exigen tener buenos reflejos, comprensión de los patrones de ataque y un tiro certero. No todo es tan duro como antes y, por ejemplo, si empiezas a estancarte en un punto verás que cada vez que resucitas lo haces con un poco más de vida que la ocasión anterior. Pero si eres de los que buscan el sufrimiento máximo, tranquilo porque hay tres niveles de dificultad por encima del normal que puedes ir desbloqueando para aumentar el reto y, por supuesto, la puntuación.

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A diferencia de otras mascotas del mundo de las plataformas, Beck no se deja querer tanto como nos hubiera gustado porque parece demasiado un clon de Mega Man, y para eso ya tenemos al original. Lo mismo ocurre con sus acompañantes, que no lucen nada en este sencillo guión repleto de clichés y sin personalidad. No es un problema para un título de acción del que esperas especialmente jugabilidad, excepto cuando tienes que escuchar algunos fragmentos que no se pueden pasar las muchas veces que repites un mismo nivel, ya sea para completarlo o para superar la puntuación o los retos. Hubiera sido muy bueno que el mimo de la jugabilidad estuviera también aquí.

No todo es el modo historia en Mighty No. 9. El modo EX, que comprende una serie de retos que simulan la Realidad Virtual, tanto para un jugador como en cooperativo, da un giro a la presentación de los niveles con más puntos en los que morir y el reloj corriendo en contra. Cada reto tiene sus propias normas y restricciones, como por ejemplo no poder disparar o no poder saltar. En el multijugador online tienes que completar el título lo más rápido posible con la ayuda de otra persona en el modo boss rush. Por suerte, y a diferencia de los clásicos de la acción 2D, este título incluye mucho más contenido que el modo básico.

Aunque le falta el carisma y el encanto de los juegos del pasado, la primera aventura de Back te hace pasarlo muy bien. Es un título repleto de situaciones y localizaciones memorables, batallas contra jefes en las que descargar adrenalina y power-ups que se hacen desear. Además, nos ha sorprendido por la cantidad de contenido que ofrece. Ya se rumorea que Comcept está trabajando en su secuela, así que esperamos que sepan aprovechar estas sólidas raíces para sacar un juego aun mejor.

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07 Gamereactor España
7 / 10
+
Las batallas contra los jefes son sensacionales, los entornos son muy variados, gran cantidad de contenido.
-
Beck no tiene carisma como protagonista, el guión es insustancial, es muy fácil abusar de los poderes.
overall score
Media Gamereactor. ¿Qué nota le pones tú? La nota de la network es la media de las reviews de varios países

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ANÁLISIS. Autor: Kieran Harris

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